Síndrome de resignación (Vol. 13)
Nota.- Este texto tenía más gracia antes de que derogaran el decreto pero igualmente les invitamos a divertirse leyéndolo (ahora ya sin miedo a la capacha)
Los niños filipinos siempre hemos sido fieles seguidores de las normas y las buenas costumbres, por eso estamos en total xxcuerdo con el decreto supremo número xxxx. Consideramos que todas las xxxxdades que su gobierno viene llevando adelante son fácilmente entendibles, a partir de que usted es una xxxona grande y que su interés está puesto en las próximas xxxxes.
Sabemos que le ha tocado una gestión complicada, primero todas las cosas de octubre y noviembre y en lo que menos pensaba pum! Presxxx. Eso no pasa todos los días, es más eso no le pasa a nadie nunca.
Ahora temas tan complicados como el corxxxx virxx, transxxxxxxx, la emergenxxx sanxxxxx y lo que parecía una oportuxxxxx se ha transformado en unx pesadxxx
Tranquxxx, “todos saldremos de esto” como dicen esas aburridas publicidades de bancos y entidades del estxxx. Usted ahí tranqui que sus secxxxxx, mejor dicho colabxxxxxxx le apoxxx en meter baxx a quien sea.
La gente de bien como nosotros, no rompemos nunca con la cuarentena, elevamos la mirada al cielo cuando pasan los helicxxxxxx uno nunca sabe si de allí caerá balx o agua bendita.
Para demostrar nuestro cumplimiento a todas las normas ponemos esta ejemplar carta a su disposición, ¡para que se la muestre a esos periodistas flojos! Además confesamos que comemos zucaritas con trigo transxxxxx y aún así nuestro tumxx cerebrxx está controlado, aunque no lo sabemos con certeza, porque desde hace dos meses nuestro médico está ocupadito con el tema covxx.
Usted siga en esa mixxxx y no se preocupe demasiado por ningún virxx. Al fin y al cabo la vida es un instante, si lo sabremos nosotros.
Sin otro particular nos despedimos
Artistas extranjeros en Bolivia
Si por cualquier motivo decidiste dedicarte a una disciplina artística y luego llegaste a Bolivia, los niños filipinos te pedimos encarecidamente que nos expliques por qué diablos te viniste a vivir a este país. Eso es como ir a comer parrillada a la India, ir a la Siberia con polera, opinar sobre política en gobierno transitorio. No amigue no, eso no se hace. Y ya deja de verle el lado romántico porque no lo tiene.
Si los avatares de la vida te trajeron a esta tierra del carnaval, la cosa era beber, bailar y morir pero en ningún caso quedarse y mucho menos pretender que se te reconozca como artista.
Sí sí, debemos admitir que aquí, con un poco menos de melanina en la piel y un acento diferente le dan a cualquiera, al menos dos grados más en la escala social sin que se lo merezca, pero vamos amigo ¿sigues royendo ese hueso? ¡Superalo!
Pasadita la Cacharpaya tenías que hacer tu maleta y mandarte a mudar a tu tierra, por qué olvidaste tan pronto los fondos concursables, los incentivos privados a las artes, las posibilidades de formación, etc, etc.
¿Qué? ¿Qué dices? ¿Qué te hiciste artista en Bolivia dices?, con mayor razón amigo, luego de semejante “acontecimiento” deberías haber redoblado tus esfuerzos por volver a tierras más prósperas. Sino ya ves lo que pasa, terminas firmando penosas cartas al estado boliviano pidiendo igualdad de condiciones, ¿qué condiciones? amigo por Dios.
No, ni todo tu talento, ni todas esas actividades auto gestionadas que hiciste en Bolivia, podrán salvarte ahora.
Recoge toda la dignidad que tienes, espera que pase la cuarentena y haz lo que debiste hacer hace mucho: vete.
Filosofía Sexy: Epicuro
Imagina un jardín, un hermoso vergel en Atenas (350 A.C. por ahí) abierto para todos donde puedas tener largas charlas, con hombres, mujeres, esclavos y aprender filosofía.
Allí está Epicuro incitándonos a despojarnos de todo aquello que nos cause dolor. Dice que esta vida es lo que hay, que se termina todo con la muerte entonces más nos vale pasarla bien, pero lejos de la mala fama de libidinoso que le hicieron después, lo que en realidad entendía por placer era la ausencia de dolor, así todas sus estrategias y formas de vida van dirigidas a la mesura. ¡¿Qué, un goloso mesurado?¡. Acompáñenme a ver esta apasionante forma de pensar la vida. Click aquí.
Viernes de estadística antimotivacional: Por si todavía tenías esperanza en algo
Más de 800 000 personas se suicidan en el mundo cada año (muertos por Coronavirus a la fecha 302 000) Si no nos crees mira aquí
Más de un millón de personas mueren cada año en accidentes de tránsito, los países “en desarrollo” son los que tienen el mayor número de víctimas. Dudas de nosotros: mira
Video más visto en youtube hasta el 2020 “Despacito” con 6.73 mil millones de visualizaciones.
Luego uno se pregunta porqué todo está como está.
Vergüenza on line: Hiciste un webinar, no asistió ni tu madre, pero sí tu jefe.
Desinformémonos
En nuestra labor acorde a los designios emitidos por la presidencia y pese a que el decreto en cuestión ha sido anulado, nos hemos llamado a dejar de desinformar a la gente, ¿Qué es eso de hablar tonterías? ¿Por qué tan pesimistas y cínicos? ¿Qué es eso de criticar obras literarias? Los jóvenes escritores bolivianos están haciendo cosas fantásticas. ¿Presentaciones de libros en Facebook live? ¿poesía on line? ¡Es lo mejor que hay! Así nos sentimos conectados y hermanados unos con otros. ¿Quédate en casa? ¡Sí! Es la única forma de salir adelante en esta crisis ¿Jugar tiro al blanco con los policías? No, no, por favor no, sino ¿quién cantará Resistiré?
En ese orden nos hemos llamado a informar ―somos un canal, un medio, una expresión― solo con la verdad y nada más que la verdad. Producto de esas cavilaciones hemos decidido dejar de lado un post tergiversado y que en nada aportaba a nuestra sociedad. Decía cosas como: “Cinco consejos para comer jabón y verse saludable” ¿Qué es eso? ¿En qué pensábamos? También decía “Jesús murió por tus pecados” o "Lavandina es el nuevo refresco de moda” ¿Qué nos pasaba por la cabeza? ¿Qué tipo de público estamos buscando? No, no, no. Basta de desinformar a la gente. Este es un mundo hermoso, lleno de alegría y comprensión donde todos estamos unidos para vencer al covid-19, además que nuestras autoridades ―a quienes elegimos por voto popular― saben lo que es mejor para nosotros.
¿Estamos hartos de Zoom? Sí, por favor no queremos que lo intentes más. No presentes tu nueva novela, no hables de películas, no nos digas cómo te sientes o peor aún, no nos muestres lo que hay detrás de ti. Sabemos que esos libros de fondo, o son prestados o no los has leído; y esa tu banderita de madre tierra la acabas de comprar ayer. Namasté
Canción recomendada: Dear Prudence - The Beatles
¿Pensaste que en todas nuestras recomendaciones musicales no caeríamos en The Beatles? ¿Un lugar común? ¿música para abuelitas? Sí y sí, pero hoy nada nos importa así que hablaremos de esta canción perteneciente al fabuloso lado A del Álbum Blanco. Lennon se inspiró en cierta amiga suya ―allá por los tiempos del retiro espiritual en India― que nunca salía de su bungalow-casa porque se la pasaba todo el tiempo meditando. “Mira a tu alrededor” “¿por qué no vienes a jugar?”
¿Por qué no sales de tu casa? ¿por qué estás tolerando todo esto? Existe un arpegio que se repite todo el tiempo; se dice que John lo aprendió de Donovan ―un artista folk de la época― y consistía en la técnica de tocar la guitarra sin púa, solo con los dedos, algo conocido como fingerpicking, que le dió un tamiz diferente a todas las canciones acústicas compuestas por Lennon en este álbum.
Hay un término que describe a la gente que se queda en casa todos los días de su vida―antes de esta cuarentena. Son conocidos como los hikikomori. Este término acuñado en Japón, consiste en gente apartada de la sociedad que se encierra en sus cuartos a vivir su vida alejados de todo contacto humano. No salen al exterior, solo interactúan con otros mediante el uso de un ordenador o juegos online por lo que han sido propensos a muchas burlas y estafas económicas. Sus intentos de adaptación al mundo real han resultado infructuosos en la mayoría de las ocasiones, por lo que requieren de mucha paciencia y perseverancia.
Al final de la canción, surgen ruidos extraños, efectos y capas de sonidos delicadamente insertados, un piano tintineante se da un paseo por el salón, mientras John pregunta si alguna vez saldrás a jugar. Libre y solo, como siempre, en el mundo de las apariencias. Escúchala aquí.
Viva nuestro gobierno.
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